san pio XPresentamos algunos fragmentos del Catecismo Mayor de San Pio X a próposito del Adviento y la Navidad.

¿Porqué se llaman ADVIENTO las cuatro semanas que preceden a la fiesta de Navidad?

Las cuatro semanas que preceden a la fiesta de Navidad se llaman Adviento, que quiere decir advenimiento o venida, porque en este tiempo la Iglesia se dispone a celebrar dignamente la memoria de la primera venida de Jesucristo a este mundo con su nacimiento temporal.

¿Qué propone la santa Iglesia a nuestra consideración en el Adviento?

La santa Iglesia en el Adviento propone a nuestra consideración cuatro cosas: 1.ª, las promesas que Dios había hecho de enviar al Mesías para nuestra salvación; 2.ª, los deseos de los antiguos Padres que suspiraban por su venida; 3.ª, la predicación de San Juan Bautista, que preparaba al pueblo para recibirle exhortando a penitencia; 4.ª, la última venida de Jesucristo en gloria a juzgar a vivos y muertos.

¿Qué hemos de hacer en el Adviento para conformarnos con las intenciones de la Iglesia?

Para conformarnos con las intenciones de la Iglesia en el Adviento hemos de hacer cinco cosas: 1.ª, meditar con viva fe y con ardiente amor el gran beneficio de la Encarnación del Hijo de Dios; 2.ª, reconocer nuestra miseria y la suma necesidad que tenemos de Jesucristo; 3.ª, suplicarle
venga a nacer y crecer espiritualmente en nosotros con su gracia; 4.ª, prepararle el camino con obras de penitencia, especialmente frecuentando los Santos Sacramentos; 5.ª, pensar a menudo en su última espantosa venida, y a la vista de ella ajustar a su vida santísima la nuestra, a fin de tener parte en su gloria.

¿Qué es NAVIDAD?

Navidad es la fiesta instituida para celebrar la memoria del nacimiento temporal de Jesucristo.

¿Por qué la Iglesia ha querido conservar la costumbre de celebrar de noche los oficios de Navidad?

La Iglesia ha querido conservar la costumbre de celebrar de noche los oficios de Navidad para renovar con vivo reconocimiento la memoria de aquella noche, en que el divino Salvador dio principio con su nacimiento a la obra de nuestra redención.

¿Qué propone la iglesia a nuestra consideración en el Evangelio de la primera Misa de Navidad? Misa del Gallo

En el Evangelio de la primera Misa de Navidad, la Iglesia propone a nuestra consideración que la Santísima Virgen, en compañía de San José, fue de Nazaret a Belén a empadronarse, según las órdenes del emperador, y no hallando otro albergue, dio a luz a Jesucristo en un establo y le puso en un pesebre o comedero de bestias.

¿Y en el Evangelio de la segunda Misa? Misa de la Aurora

En el Evangelio de la secunda Misa propone la Iglesia a nuestra consideración la visita que hicieron a Jesucristo unos pobres pastores a quienes un ángel anunció el nacimiento del Salvador.

¿Y en el Evangelio de la tercera Misa? Misa del día

En el Evangelio de la tercera Misa nos hace considerar la Iglesia cómo este Niño que vemos nacer de María Virgen en el tiempo, es desde la eternidad Hijo de Dios.

¿Qué pretende la Iglesia al proponer a nuestra con­sideración los misterios de las tres Misas de Navidad?

Al proponer a nuestra consideración los misterios de las tres Misa de Navidad, quiere la Iglesia que demos gracias al Re­dentor divino por haberse hecho hombre por nuestra salva­ción, le reconozcamos - con los pastores - y le adoremos comoverdadero Hijo de Dios, atendiendo a las enseñanzas que ca­lladamente nos da con las circunstancias de su nacimiento.

¿Qué nos enseña Jesucristo con las circunstancias de su nacimiento?

Con las circunstancias de su nacimiento, Jesucristo nos enseña a renunciar a las vanidades del mundo y a estimar la pobreza y los trabajos.

¿Qué hemos de hacer por Navidad para conformarnos plenamente con las intenciones de la Iglesia?

Por Navidad hemos de hacer estas cuatro cosas: 1ª, prepararnos la víspera con un recogimiento mayor que de costumbre; 2ª, procurar gran pureza por medio de una buena confesión y vivos deseos de recibir al Señor; 3ª, asistir, si nos es posible, a los divinos oficios de la noche anterior y a las tres Misas, meditando el misterio que se celebra; 4ª, emplear ese día, cuanto nos sea posible, en obras de cristiana piedad